No todo es amor (Cuento Corto)

No Todo Es Amor.

En esa noche de tormenta en donde se despertó la lujuria olvidada en lo más profundo de mi ser, ella, la que cautivos mis sentidos y toda mi persona dejo que durmiera hasta el final.     
La conocí esa noche, de diciembre 23 en que toda una vida empezaba para mí.
Ya la conocía de mis sueños por eso intente conocerla y conquistarla, yo de de ella sabia pocas cosas bastaba con decir que solo su nombre y edad, luego ella de mi conocía la vida. 
Eso es lo que lleva a un hombre a la perdición pensaba yo, pero no importaba, nunca importaba me deje llevar sin darme cuenta que entraba en una vida miserable, vacía, y triste. Desde hace tiempo he conocido muchas mujeres pero ninguna como ella, todas rusticas y con sentimientos puros, ella era linda, inteligente, dulce, amable pero sus sentimientos escondidos en lo más oscuro de su ser decían lo contrario.   
Las cosas parecían venir bastante bien, logre comprometerme, juntarme, casarme y hemos tenido una hija que no ah logrado sobrevivir al gusto amargo de la vida y así  siguió su trayecto fúnebre.      
En todos estos años logre demostrarle muchos sentimientos que nunca le mostré  a nadie de los cuales ella carecía, ella solo se encargaba en gastar en cosas para ella misma y en alguien más que no era yo, cada noche, cada tarde y día ella llegaba con un gesto distinto en su rostro como si esa persona a la que ella estaba viendo le estaba guiando hacia un camino que no  le gustaba pero le favorecía. Una mañana le pregunte si algo le pasaba o si mi herencia tenía algo que ver. No debí créele.         
Ella tenía planes de un viaje que me pensaba regalar luego de tantos años que me tenía olvidado.
Dice que era una sorpresa que no iba a poder creer y que iba a quedar con una expresión en la cara que jamás me ah visto poner. Yo le creí y hasta podría decir que me dio gusto y me puso realmente feliz.    
Una noche, no de las mejores, pero era especial; ella se vistió con un vestido rojo que le deslumbraba los ojos y ese perfume que atenuó mis sentidos, se vestía para ese regalo tan importante que me iba  a regalar. Me lo prometió después de cenar y yo sin preguntas ni objeciones le seguí el juego.          
Luego de unas copas de más, una comida afrodisiaca, velas y un escote que prometía mucho llegamos al cuarto en donde la lujuria nos invadió. Ella luego  me conto el día que nos conocimos, yo sin poderme levantar por algún tipo de droga que le había puesto a la bebida no me quedo  más remedio que escuchar el relato, conto la noche y toda nuestra vida con una tranquilidad que le había llevado años, sin esperar que ella dijera que tenía un amante hace años que le había comprado una casa y que era ese alguien del que se enamoro y que su relación fue solo un engaño para apoderarse de sus preciadas pertenencias. El, deslumbrado del cuento le dijo la fecha que era hoy y ella le contesto que diciembre 23 y dijo que era el día perfecto con la excusa perfecta. Esa droga que había puesto en su bebida no podía mezclarse con alcohol lo cual lograba un pre infarto seguido de un infarto catastrófico. En esa noche que se transformo en una de las tormenta más grandes en donde había despertado la lujuria y quedo olvidada en lo más profundo de su ser, ella, la que había cautivado sus sentidos y toda su persona dejo que el durmiera hasta el final.